Porque está arriba, está abajo; como está adentro, está afuera; como el alma, es el cuerpo.
Para poder maximizar el efecto de la brujería, un mago blanco juega rituales que se enfocan en el crecimiento o crecimiento (de amor, dinero, suerte fantástica…) a través de la luna creciente. Y en la luna menguante, el mago realiza rituales que se centran en la reducción o desaparición (enfermedad, mala suerte…). Junto con la analogía básica de esta luna, hay una analogía planetaria más compleja, pero también frecuentemente utilizada. La magia planetaria nos dice que cada día y cada hora se delega en un mundo determinado.
La rama básica de días de la semana es la siguiente:
Sábado, mundo Saturno:
Ayudará a cuidar los hábitos, a ganar resistencia: alcanzar objetivos a largo plazo, hasta el final.
Representa poder, confianza en sí mismo, vitalidad, dinero, salud.
El lunes, la luna:
Tiene que ver con el instinto, la familia, las relaciones, los cambios, la espiritualidad.
Martes planeta Marte:
Te da el poder de superar obstáculos, incluyendo accidentes, y te permite tomar decisiones rápidas.
Miércoles planeta Mercurio:
La comunicación y el poder de convicción, una ayuda ideal para los exámenes.
Jueves planeta Júpiter:
Para atraer bienestar a través de nuevas oportunidades, ayuda en casos de falta de dinero y justicia.
Viernes planeta Venus:
Magia blanca del amor, atrayendo armonía, placer, pasión romántica, alegría, arte y belleza.